De los días de la prisión, tenemos unas notas escritas por las hijas religiosas. Las primeras, escritas a lápiz, probablemente son de Josefa.
Ayer viernes hicimos la primera declaración, y todo lo que nos pidieron fue respecto a los Conventos, del tiempo que entramos y del modo de vivir y cosas semejantes, pero tienes que volver, ya veremos, no lo digas
También pedimos a los guardias, por favor, dejaran salir a Felicidad y a la madre salir al huerto, que les diera el aire. Y salieron con el guardia, y estuvieron un rato juntos. El guardia es bondadoso y lo pasé muy bien, y la madre está más animada.
Anoche, cuando íbamos a cenar, se presentaron tres jóvenes, uno hijo del pueblo y se encaró con la madre y le preguntó si era la presidenta de la Conferencia y que venía para que le diera explicación de todo. La madre le dijo lo que sabía, pero no se conformó, y dijo al-
gunas palabras que la madre se disgustó mucho, y nosotras también, y nos quedamos sin comer, y dice que volverá para enterarse de más. Lo digo esto para que veas si se puede impedir, que no vuelvan a molestarla, pues la madre no está para disgustos. Nosotras también lo pediremos al Sr. Cabo de aquí, a ver si lo puede impedir.
Probablente escrita por María Jesús
Día 23 viernes de octubre de 1936.
Hicimos la primera declaración y todo lo que nos piden fue respecto a los conventos, del tiempo en que entramos y del modo de servir, y cosas semejantes. pero tienen que volver, ya veremos, no lo digan.
También les pedimos al salir, que por favor dejen salir a mi madre y Felicidad del cuarto, para que les diera el aire y el sol, y salieron con el guardia. Estuvieron un rato juntos con el guardia, y es bondadoso, y lo pasé muy bien, y la madre está muy animada.